Barandillas de seguridad: Instalación

En Grupo FPT realizamos instalaciones autorizadas de barandillas de seguridad. Como todos sabemos, las barandas de aluminio son un medio de protección colectiva que se utiliza para proteger el perímetro de naves o de cubiertas planas no transitables, previniendo el riesgo de caída de las personas que accedan o trabajen en ellas. Estas deben estar conformadas de un material cuya resistencia y durabilidad sean altas, y colocadas a una altura mínima de forma que retenga el cuerpo de un operario ante cualquier desequilibrio. Para tomar las precauciones necesarias en la instalación de barandillas de seguridad, es recomendable que cuentes con un equipo de expertos en el sector como somos en Grupo FPT. Nuestros profesionales disponen de los conocimientos necesarios para la instalación y también revisión de tus sistemas de protección que, como bien sabes, necesitan un mantenimiento determinado para no correr riesgos.

Partes de una barandilla de seguridad

Las partes de una barandilla de seguridad, según el protocolo NTP 123, son: el montante, el plinto o rodapié, la barandilla y, la barra horizontal o listón intermedio. El montante es el esqueleto de la barandilla de seguridad para obras puesto que a él se fijan el resto de los elementos que la componen. Se trata del elemento vertical que une todas las partes del guardacuerpo con el borde superficie que protege. El plinto o rodapié es el elemento vertical colocado a ras de suelo que impide la caída de objetos, e incluso, que el pie de un operario se resbale por debajo de la barandilla. Sirve también de freno para los materiales y herramientas que se caigan a la superficie, evitando un posible deslizamiento hacia el vacío y que dañen a un tercero. La barandilla en sí es la barra superior, esa en la que las personas suelen apoyar las manos. Su principal fin es dar la sujeción necesaria en un momento determinado del trabajo. Y, finalmente, otro de los elementos de las barandillas de seguridad indispensables es la barra horizontal o listón intermedio. Es la que se coloca entre el plinto o rodapié y la barandilla, que actúa de freno ante el deslizamiento de un cuerpo a través del conjunto. En la instalación de barandillas de seguridad para cubiertas, entre otras superficies, es muy importante la fijación de todos estos elementos para que consigan su cometido. Cualquier error en el montaje pone en riesgo la vida de quienes tengan que acudir a este sistema anticaídas, así que elige a profesionales autorizados para que desempeñen esta tarea.

Normativa barandillas industriales

Existe una normativa de barandillas industriales recogida en el Artículo 23 de la Ordenanza General de Seguridad e Higiene en el Trabajo, que determina las exigencias que tienen que cumplir estos equipos para soportar los esfuerzos requeridos. En ella se pide que los materiales sean resistentes y rígidos, con una calidad mínima para que ejerzan su función adecuadamente. Ten en cuenta que tienen que ser capaces de resistir la carga de 150 kg por metro lineal, como mínimo.

También indica que la altura de las barandillas de seguridad para obras tiene que ser de 80 cm mínimo sobre el suelo. Y, además, es obligatorio que posea al menos una barra horizontal o listón intermedio para que el hueco entre la barra superior y el plinto no quede vacío. Asimismo, el plinto o rodapié debe estar a 15 cm mínimo sobre el nivel de la superficie.

Información de interés

¿Barandillas de aluminio o líneas de vida?

En muchas ocasiones, a los responsables de obra les surge la pregunta de si es mejor utilizar barandillas de aluminio o líneas de vida en sus trabajos en altura. Si recurrimos a la normativa vigente para la prevención de riesgos laborales, los equipos de protección colectiva, entre los que se encuentra la barandilla de seguridad de obra, siempre va a prevalecer ante los equipos de protección individual (EPIs). Entendiendo que las líneas de vida no son un EPI, sí es cierto que requieren el uso de EPIs para ejercer sus funciones. 

En cuanto a la capacidad de protección, hay que decir que las líneas de vida llegan a asegurar a un número determinado de personas que oscilan entre de 1 y 3, habitualmente. En el caso de las barandillas de seguridad para terrazas, este número es mucho mayor, de ahí que se incluyan dentro de los sistemas de protección colectiva.

También hay que hablar del objetivo que persiguen estos sistemas. Mientras que las barandillas de aluminio eliminan el riesgo de caída desde un lugar en altura, las líneas de vida solo reducen las consecuencias en caso de caída. Los dos son complementarios pero sus funciones son diferentes. A esto hay que añadir que los trabajadores que empleen líneas de vida tienen que estar formados para conocer los procedimientos que requieren, cuáles son las más apropiadas para cada actividad, etc. Mientras que las barandas de seguridad no necesitan ninguna instrucción previa al uso.

Mantenimiento de barandillas de seguridad construcción

Una de las características más prácticas de las barandillas de seguridad de construcción es que su coste de mantenimiento es cerca de nulo. Aunque te recordamos que, si eres de los que evalúa qué solución anticaídas es mejor para el equipo condicionado por el precio, quizás no elijas la más adecuada para la actividad en cuestión. Siempre le decimos a nuestros clientes que invertir en elementos de protección de calidad debería ser obligatorio, ya que no hay nada más valioso que la vida de una persona.

En cualquier caso, hay otros materiales como las líneas de vida que requieren un mantenimiento anual, por ejemplo, pero no es la situación de las barandillas de seguridad.

Altura mínima barandilla homologada

La altura mínima de una barandilla homologada es de 90 cm, pero si la caída supera los 6m, la cifra de la altura mínima de la barandilla tiene que ser 110 cm. La legislación exige su colocación para cubrir caídas iguales o superiores a 2 m, aunque es aconsejable su instalación a partir de caídas de 1 m. Y también es importante que entre la barandilla superior e intermedia, y entre la intermedia y el rodapié, no exista un hueco superior a 500 mm. Del mismo modo, el espacio entre el rodapié y el suelo no puede ser superior a 10 mm.

Las barandillas de seguridad para andamios, al igual que todas en general, deben alcanzar una altura de entre los 1.000 mm y 1.100 mm sobre el plano por donde van a discurrir personas. Esto debe estar muy presente cuando la cota de la zona de colocación es inferior a la cota de tránsito.

Asimismo, durante la instalación de barandillas de seguridad debe existir un medio de protección para los montadores como puede ser una línea de vida temporal, etc.

Tipos de barandillas de seguridad

Los tipos de barandillas de seguridad que instalamos en Grupo FPT en base a la clase de anclaje que se realice para la instalación de los montantes, son: a suelo, a pared, a pared con desplazamiento, bajo cubierta, sobre techo con aislamiento, bajo cubiertas con chapa de aislamiento, para cubiertas de chapas metálicas y, autoportantes o contrapesadas. Las barandillas contrapesadas son peculiares ya que en su proceso de instalación no se necesita hacer ninguna perforación. Eso sí, los contrapesos deben tener una gravedad importante para que no haya sustos.

Estas también se pueden clasificar en función del soporte sobre el que se coloquen. En este caso, los tipos de barandillas de seguridad serían: barandillas abatibles para la protección de claraboyas, y barandillas de protección ancladas directamente a la superficie.

Nuestro equipo de profesionales está perfectamente capacitado para indicarte qué tipo de barandilla es la que más se adecua a la zona que quieres asegurar. No pierdas la oportunidad de contactar con nosotros para ayudarte a velar por la salud de tus operarios.

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